Tras arrasar en los Grammy y haber vendido más de 50 millones de discos, la artista llega a la Argentina. Para su primer show pidió vajilla de plata y vasos de cristal, además de mucha luz para maquillarse y arreglos florales sin polen.
Beyoncé Knowles llega a la Argentina para presentarse en el Hipódromo de San Isidro, en Buenos Aires, el 12 de febrero, y su estadía por primera vez en el país ya está causando revuelo.Dos aviones provenientes de Brasil aterrizarán en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza horas antes del show. Uno transportará a la ex Destiny’s Child y a su crew de más de 70 personas, y otro únicamente destinado a equipos, vestimenta y accesorios para el show. “Es un despliegue a lo Madonna”, aseguran desde la productora que la trae al país.
Exigió una cocina con un buen espacio para que su chef personal pueda trabajar cómodo, y la compra de supermercado debe incluir leche de soja, miel, frutas secas, verduras, vino blanco y tinto, distintos tipos de pescado, chocolates bajos en calorías, yogures y té de varios sabores y diferentes jugos de fruta. Beyoncé pidió que todos los platos de la vajilla sean de tamaño pequeño, de postre, por consejo de su nutricionista.
No sólo la cuida su médico, también lo hace su papá, Mathew Knowles, que la vigila de cerca, ya que es su mánager. Además fue productor de su tercer y último disco, “I am… sasha fierce”. “Ella es una persona muy normal, común, sus pedidos no son nada fuera de lo que pide cualquier otro artista internacional, y al trato es muy amable”, afirmaron a esta revista desde la organización.Tras arrasar en los premios Grammy, haber sido elegida “la Mujer del Año 2009” por la revista “Billboard” y haber vendido más de 50 millones de discos en su carrera, la texana espera hacer vibrar al público argentino y, para eso, prometió un show inolvidable.
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